¿Conoces a alguien que quiera renunciar a mejorar o a seguir creciendo como persona? Formulada la pregunta de esta manera, se hace difícil pensar de que no, pero también es cierto que son muchas las personas cuyo objetivo es mantenerse a toda costa en su zona de confort. Los retos que se te plantean, si quieres seguir creciendo, requieren una actitud especialmente positiva, donde sumar tiene un papel protagonista. Por ello voy a explicarte qué es el mindset.
¿Qué es el mindset?
Es, lisa y llanamente, la mentalidad de creer que puedes mejorar. Para ello, debes conocer tus defectos y perseverar para entender qué está en nuestra mano cambiar esos hábitos que te impiden crecer. Existen dos mentalidades básicas, la fija –recuerda lo que te explicaba de la zona de confort, cuando te sientes cómodo y te cierras a seguir evolucionando por miedo a que los cambios te provoquen problemas que ahora son innecesarios– y la de crecimiento.
Mindset: mentalidad de crecimiento

Lo primero que debes asumir es que sólo la mentalidad de crecimiento te conducirá a un éxito verdadero en todos los órdenes de la vida. Nuestras vidas son caminos y aunque todo no se puede predecir ni calcular, sí que es cierto que la ruta irá marcada por nuestras decisiones o nuestras inacciones. Por ello, es indispensable que entiendas que el camino lo decides tú, o para ser más precisos, es indispensable que entiendas que está en tus manos decidir el camino: la vida seguirá su curso tomes tú el timón o dejes que lo hagan los otros o que el barco vaya solo. Con el mindset, tú coges las riendas y vas perfilando en todo momento la ruta en función de tus prioridades o necesidades.
Llegados a este punto, ya te habrás hecho una idea aproximada del mindset. Tal vez te ha gustado esta filosofía y te estás preguntando cómo puedes abrazar esta manera de enfocar la vida.
Cinco acciones para activar el mindset
Ten paciencia contigo mismo

Las cosas no siempre salen bien a la primera y es fácil reaccionar con frustración ante un fracaso. En este sentido y para encarar tu existencia con la cabeza bien alta, debes asumir de entrada, estos golpes .Por este motivo, uno de tus primeros objetivos es prepararte emocionalmente para soportar estos guantazos y, al mismo tiempo, fortalecerte para capear el temporal y reforzarte. Para lograrlo, más de una vez deberás pedir consejo a un amigo, su perspectiva del problema puede que sea diferente y te ayude. Debes ser más práctico y hacer las cosas más fáciles, huyendo de las complejidades innecesarias.
Aprende de tus errores

Habrás oído hasta la saciedad la máxima de que se aprende más de los errores que de los éxitos. Esta frase es más cierta que la vida misma, pero hay muchas maneras de aprender de las equivocaciones. Forman parte de tu proceso de aprendizaje, pero debes analizarla con detalle y estrujarte la mollera para que tu cerebro se quede todo el jugo positivo, con él seguirás avanzando.
Nuevos hábitos para una nueva forma de vida

Ahora que te has decidido por una mente en crecimiento, debes encontrar aquellos mecanismos que refuercen que están en un proceso de cambio importante de tu personalidad. Busca sistemas nuevos que se vinculen con esta nueva vida, por ejemplo, ir al gimnasio, comer de manera regular, dejar de fumar, ir a dormir siempre a la misma hora… Si notas que los cambios te sientan bien, descubrirás que vas por el buen camino y tu energía positiva se multiplicará ante el reto y te será fácil de sustituir los hábitos dañinos.
Piensa en positivo

Escápate lo más lejos que puedas de los sentimientos negativos y de las personas que respiran negatividad porque su tendencia natural es que, ante lo desconocido, es mejor quedarse en la zona de confort. Tu camino es en dirección contraria. Respira con fuerza y sonríe siempre que puedas y contagiarás tu manera de ser: harás mejores a los demás y, por tanto, a ti mismo.
Escribe tu plan de acción

A veces queremos cambiar nuestro estilo de vida, pero no sabemos cómo empezar ni porqué circunstancia o hecho. Para invertir esta dinámica, la mejor solución es tomar papel y lápiz y escribir todo lo que queremos planificar y cambiar de nuestras vidas. Al principio, es posible que te quedes blanco y no sepas por dónde empezar; si es así, comienza por las cosas pequeñas y poco a poco tus retos irán creciendo, igual que el sentido de tu mente, siempre dispuesta a evolucionar.
¿Sabías que…?
El mindset es una teoría creada por Carol Dweck, profesora de psicología en la Universidad de Stanford, quien determinó que los seres humanos podían tener dos tipos de mentalidades o mindsets: la fija o la abierta (crecimiento).