Trabajar y estudiar al mismo tiempo es una tarea un tanto difícil, pero con una correcta gestión del tiempo y motivación, es sencillo de lograr. Si sigues las pautas que vamos a comentar hoy, créeme que estudiar y trabajar será una tarea mucho más sencilla para ti.
Cuando estudiamos, generalmente intentamos dedicar tiempo a nuestras asignaciones, y pasamos horas realizando trabajos de investigación, estudiar, repetir ejercicios, preparar los exámenes, etc.
Yo también lo viví, es por esto que aquí te presentaré las claves que me ayudaron lograrlo de forma rápida y eficiente.
Toma papel y lápiz, a continuación te invito a descubrir cómo trabajar y estudiar al mismo tiempo, sin necesidad de sacrificar horas de sueño.
¿Cuáles son los tips para trabajar y estudiar al mismo tiempo?
En estos casos el tiempo y nuestra motivación se convierten en los mejores aliados para sacar adelante estos 2 trabajos de forma eficiente y simultáneamente.
¿Pero cómo podemos hacerlo de forma en la que no tengamos ningún tipo de retraso? Yo te lo presentare en los siguientes títulos.
1. Tu tiempo es oro, aprovéchalo en tus estudios
Siempre me ha gustado decir que el trabajo no es el fin, tan solo es el medio para alcanzar cada una de tus metas.
Es por esto que necesitamos nuestro cerebro lo más fresco posible, para aprovechar cada una de las clases que veamos a lo largo del día.
Por lo tanto, a la hora de decidir horarios lectivos de mañana o de tarde, si puedes priorizar por delante del horario laboral porque dispones de flexibilidad en el trabajo, debes decidir según tu ritmo biológico.
Hay personas que se levantan a tope, despejadas, con todos los sentidos y la capacidad de atención en formato “on”.
En cambio, hay otras personas que tienen un ritmo más progresivo y alcanzan esos niveles por las tardes. ¿Cuál es tu ritmo biológico? … La respuesta te dirá cuál es mejor horario.
Cambiar tu horario y priorizar el madrugar un poco de forma constante para poder adelantar tareas de estudio te permitirá llevar tus estudios mucho mejor de lo que crees.
Por el contrario, si eres más de tardes, aprovecha y gana ese tiempo por la noche.
Cuando hacemos esto, estamos aligerando las cargas de nuestros estudios, quitándonos un gran peso de ansiedad porque lo llevamos más fácilmente todo al día, y evitamos retrasos innecesarios.
2. En los tiempos libres de tu trabajo, dedícalos a repasar mentalmente.
En el trabajo, a veces contamos con un tiempo libre, ya sea porque no hay clientes, o simplemente porque ya cumpliste con todas las tareas del día.
En esos momentos libres en los que no tienes nada que hacer, te invito en que repases mentalmente cada una de las clases que viste en el día.
Tener esta iniciativa, te mantendrá el cerebro fresco con conocimientos que has estudiado en la clase, de esta forma, será más sencillo retener y asimilar información eficazmente.
3. No olvides los encuentros con amistades
Todos los días el tiempo es un factor que puede jugar a tu favor, o a tu contra, todo depende de cómo lo distribuyas.
Es normal que en un momento de mayor tensión, sea por exámenes o presentación de trabajos, se eliminen de tu agenda los encuentros con tu entorno de amistades y amigos.
Seguramente es un tipo de actuación muy acertado para evitar distracciones o excesos que te pueden penalizar en los días siguientes.
Pero no es lo mismo durante el curso, si además de llevar un horario apretado por los estudios y el trabajo, y también dejas fuera de tu agenda esos encuentros a medio plazo.
Lo más acertado es limitar los encuentros pero en ningún caso eliminarlos.
Somos seres emocionales y la restricción de contacto puede acarrear problemas mayores que en todos los casos afectaría a tu rendimiento tanto académico como laboral.
Siempre hay tiempo para tomar una cerveza y compartir unas risas con tus amigos, simplemente depende de tu organización y el uso del tiempo cuando estas en clase y estudiando.
Haz que el tiempo juegue a tu favor, no a tu contra.
4. Crea un cronograma con tus horarios de estudio y trabajo.
La organización juega un papel clave para trabajar y estudiar al mismo tiempo, es por esto que la mejor forma para organizar tus ideas se basa en crear un cronograma con cada una de las tareas que debes hacer a diario.
Te invito a que también coloques la hora en la que estarán listas, de esta forma, te mantendrás en un estado de proactividad admirable, que te garantizará el éxito en todo lo que te propongas, incluso en encontrar el hueco para la cerveza con los amigos 😉
Hacer esto, marcara una diferencia significativa entre tú, a día de hoy, y el tú, de unos 3 meses.
5. El Descanso… y la Atención
Un de los mayores errores es el de sacrificar horas de sueño y descanso por estudio, partiendo de la base que soy el primero que ha realizado esta práctica.
Todos sabemos que tenemos un número de horas de dormir que podríamos llamar “ideal”.
Esto es lo que hace que me levante perfectamente, descansado, ágil de pensamientos y “como nuevo”, para entendernos fácilmente.
Y también sabemos que, si me paso de ese número ideal de horas, ya ha cambiado algo, estoy más lento, progresivo, cuesta un poco más todo y la idea de “estoy como nuevo” ni se nos pasa por la cabeza.
El tema es marcar el horario de sueño y así poder adaptar tus horarios en el cronograma teniendo en cuenta tus horas de sueño.
Por otro lado, y por supuesto no menos importante, tenemos nuestra capacidad de atención.
Cuando aseguras tu descanso, tus capacidades y habilidades están a pleno rendimiento, y esta es la gran diferencia cuando hablamos de aprovechar el tiempo.
- Si has descansado bien, te será fácil seguir la clase con atención plena en el tema que se este tratando.
- Si atiendes a las clases con atención plena, tu grado de asimilación es mucho mayor.
- Si tu grado de asimilación es mayor, necesitarás menos tiempo del que estás acostumbrado a estudiar.
- Si necesitas algo menos de tiempo para cada asignatura, podrás trabajar en todas regularmente.
- Si puedes trabajar en todas ellas de forma regular (semanalmente), lo llevaras bien y con seguridad
- Y, si lo llevas bien, aún te sentirás mejor de poder tomar esa cerveza con tus amigos.
6. Un factor clave para trabajar y estudiar al mismo tiempo es siempre tener desarrollada tu meta
Si desarrollas tu meta, creando el plan de acción, te darás cuenta que en líneas generales los puntos que hemos visto hoy te saldrán para que puedas decidir cuál es la mejor solución a adoptar en cada momento.
¿Por qué estás haciendo esto?
Tener claros los beneficios y las pérdidas a evitar de alcanzar tu meta te permitirán mantener tus niveles de motivación, cosa muy importante.
Seguir un cronograma implica pequeños cambios en tus rutinas, a los cuales tu subconsciente se resistirá.
Recuerda: Si desarrollas tu meta por escrito y sigues las pautas que hemos comentado hoy, créeme que estudiar y trabajar será una tarea mucho más sencilla para ti.